Pretensiones de relationship

Pretensiones de relationship

  • El alumno, repito, tiene que ser educable, venir al cole con ganas de aprender; el maestro, un profesional a secas, cuyo papel sea enseñar y no dedicar su energía a bufonadas buenrrollistas; y el resto de la sociedad, un amparo para que los jóvenes puedan desarrollar una carrera y una vida normal.

 

Se anda diciendo que es el profesor quien debe hacerse respetar por sus alumnos, lo cual quiere decir que no merece su estima por el mero hecho de serlo.  Allá cada cual con su opinión, pero esto demuestra lo poco que se sabe cómo debe ser una clase.

En la clase debe reinar un ambiente de aprendizaje, no la ley de la jungla. Se supone que el crío es un ser educable, es decir, que ya ha recibido la educación correspondiente de su papá y mamá para que yo consiga enseñarle cosas y contribuir con ello a su formación. Pero, claro, como en la sociedad moderna cada trabajo tiene su área de desarrollo claramente delimitada, el lugar destinado a la educación es la escuela, que para eso pagamos al profesor. Ni la familia ni el resto de la sociedad ha de inmiscuirse en este proceso.

¿O sí?

El objetivo de una clase es que el alumno, al final de la misma, tenga algo aprendido, algo útil, que le sirva en adelante. Si esto no se ha conseguido, podemos darla por perdida y es una pena. La pregunta subsiguiente es ¿y luego qué?

Admitamos que los alumnos son totalmente obedientes y respetan la autoridad del profesor porque sí. ¿Qué hacen con los estudios acumulados en un ambiente de aprendizaje disciplinado? Es decir, si después no consiguen trabajo, ¿para qué estudian? ¿Por el mero placer de estudiar y de aprender? Totalmente de acuerdo también con eso, sin ambargo el funcionamiento de la sociedad es guiado por las  leyes del mercado y ha de haber, necesariamente, una continuidad entre la formación y la posterior aplicación práctica de lo estudiado. Y como esto no siempre es así, no es justo pretender que solo sea el maestro quien enseñe, eduque, cree ambientes agradables o qué sé yo qué más. El alumno, repito, tiene que ser educable, venir al cole con ganas de aprender; el maestro, un profesional a secas, cuyo papel sea enseñar y no dedicar su energía a bufonadas buenrrollistas; y el resto de la sociedad, un amparo para que los jóvenes puedan desarrollar una carrera y una vida normal. Como esto no ocurra, nos irá como nos va ahora, yo perdiendo el tiempo en crear buen ambiente y el alumno molestándose cada vez que mi esfuerzo no concuerde con sus pretensiones de relationship.

títulos relacionados: MAESTRO EN CLASE, MAESTRO, TÚ A LO TUYO, ¿CÓMO ES POSIBLE QUE NO LO SEPAS?, CUATRO LÍNEAS

 

Leave a Reply

This site uses Akismet to reduce spam. Learn how your comment data is processed.